domingo, 25 de marzo de 2012

IU, llave del gobierno en Andalucía


Con prácticamente el 100 por cien de los votos al parlamento andaluz escrutados, se podría decir que el ganador de las elecciones de este 25 de marzo ha sido Izquierda Unida, que ha pasado de 6 a 12 diputados. El PSOE ha sufrido un gran descalabro, pero no en las dimensiones que se esperaba, la verdad sea dicha. El Partido Popular,  con el señor Javier Arenas a la cabeza, ha pagado el pato de las primeras medidas y recortes del Partido Popular en el gobierno central, otro gallo hubiera cantado si estos comicios se hubieran celebrado el 20 de noviembre junto a las generales, posiblemente entonces se hubiera llegado a los 55 diputados... o no
A mi parecer, en el día de hoy ha pasado lo siguiente en Andalucía: muchos de los votantes del PSOE se han quedado en casa (es una de las razones que han hecho que la abstención haya aumentado casi un 10 por ciento), otros tantos han votado a IU (de ahí su gran éxito) y el resto han votado a su partido por costumbre, no por convicción (creo yo). Los votantes del PP no han cambiado lo más mínimo, 1.560.899 andaluces han votado hoy a Arenas, frente a 1.730.154 que lo hicieron en 2008, por lo que tampoco puede este partido tildar de histórico el resultado. UPyD y PA han tenido un número importante de votos, pero no los suficientes como para tener representación en la cámara andaluza.
La cuestión ahora es saber qué pasará a partir de mañana. Lo más probable es que IU haga un pacto, más o menos profundo, con el PSOE y que el señor Griñán vuelva a presidir el gobierno de la Junta de Andalucía. Se podrían barajar muchas más posibilidades, como que IU apoyara a Arenas circunstancialmente para que gobernara y que luego lo atara en corto; que IU exigiera al PSOE la presidencia de la Junta a cambio de su apoyo (no podemos descartar ver a Diego Valderas como presidente)... 
Izquierda Unida será quién decidirá lo que pasará ahora. Serán ellos los que tendrán que exigir lo mejor para los andaluces... Y confío en que lo harán
Sea como sea, espero y deseo con todas mis fuerzas que el equipo de personas que nos gobiernen lo hagan siendo conscientes de que tienen en sus manos el destino de un pueblo que se merece mucho y que no tiene por qué aguantar que cuatro sinvergüenzas se coman (o esnifen) el dinero que con mucho esfuerzo nos ganamos... 







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